Palabras pronunciadas por quien fue Campeón del Mundo del Concurso Radiotelegráfico de la A.R.R.L. en 1933, ante el micrófono de Radio Falange, de Alicante, hablando de los alicientes de la Radioafición en aquellos años. Esta charla fue publicada en la revista URE, núm. 16, de diciembre de 1951.